Piluca Alonso lleva ya formando parte de familia Give&Go dos años y es una de nuestras entrenadoras clave en el Campus Give&Go Jaca-Pirineos. Hoy queremos conocerla un poquito mejor.

Se podría hacer un repaso por los muchísimos logros y gran trayectoria de Piluca Alonso. Explicar porqué es una histórica del baloncesto con más de 170 internacionalidades a sus espaldas que forma parte del Salón de la Fama de FEB, o como contribuyó a ganar el primer oro en un Eurobasket (1993). También podríamos hablar de su infinitud de participaciones en competiciones con la selección española que van desde Eurobasket, hasta unos Juegos Olímpicos pasando por Mundiales (si, mundiales en plural). O de todos los logros que ha conseguido a nivel de clubes, como que tiene una Copa de la Reina, varias ligas en su haber y una Copa de Europa y otra del Mundo en su palmarés.

Pero creemos que es más interesante conocer a Piluca por quién es, no por lo que ha conseguido. Piluca es una mujer que no se da por vencida, es responsable y trabajadora, sabe encajar derrotas y aprender de ellas (probablemente gracias a esto se deben algunos de sus éxitos), es inteligente, decidida y cariñosa (pero justa) con sus jugadores y jugadoras, es divertida y sobre todo una enamorada del baloncesto.

P: Estoy viendo ese balón que tan brillante que tienes detrás…

R: Estar en el Hall de la fama para mí es una pasada. Una gran sorpresa. Después de 20 años… La verdad es que cuando ganamos la medalla de Europa, al volver estaban en el aeropuerto las familias y no recuerdo si había algún medio o alguien… Si había habría poco. Paso un poco, así como si nada… “Han ganado” y ya está. Era también a lo que estábamos acostumbradas porque no se nos daba más visibilidad. Y que ahora nos hallas reconocido, que estemos en el primer salón de la fama. Me ha pillado por sorpresa y me ha encantado. Es emocionante. Veinte años después todavía se acuerdan de ti. La Federación ha tenido un detallazo.

P: ¿Cómo se sintió ese Primer oro Europeo?

R: La verdad es que lo recuerdo como un sueño. Nosotras cuando empezamos a jugar con la selección, no ya la absoluta, sino la junior, perdíamos de treinta o cuarenta todos los partidos. Y es lo que digo: la superación. Un logro.

P: ¿Cuál crees que fue el motivo del éxito?

R: Intentar hacerlo lo mejor posible, no rendirse. Mejorar y mejorar. La preparación física que nos hacían. Poniéndole muchas ganas. Si tú no pones la intensidad no puedes hacer nada, tanto en un entrenamiento como en un partido. Yo pienso que juegas como entrenas. Si tu entrenas al 100%, en un partido estarás al 80%. Mi carrera y la de mis compañeras ha sido siempre muy sacrificada, quizá siempre se habla de lo bonito. De que se ha llegado arriba. Pero eso cuesta, nos ha costado muchas lágrimas, de no poder más, dolor, agujetas, lesiones… Es duro, se sufre para llegar al objetivo. Hay que trabajar y esforzarse, no son cosas que te dan hechas.

P: ¿Tenías referentes cuando empezaste a jugar?

R: Para mí el baloncesto era algo nuevo. Al principio yo veía partidos de los chicos, ACB. Me gustaba mucho Fernando Martín. Villacampa, Epi. Nuestra entrenadora era la que nos animaba a verlos. Pero la verdad es que jugadoras, que recuerde, eran las de mi entrenadora. Ella jugaba en un equipo senior y entrenábamos con ellas y nos metían una caña que no veas. Y las tenías a ellas de referentes, querer entrar a canasta tan bien como ellas, votar o colocarse en el campo.

P: ¿Cómo ves la situación del Baloncesto Femenino Profesional actual?

R: Desde que he vuelto creo que como que hemos avanzado poquito, ¿no? Por un lado, como que hemos avanzado, se oye, pero que no tenemos todavía demasiada visibilidad. ¿Cuántos partidos femeninos se retransmiten en la Tele? O te los buscas tú online o no tienes manera de llegar y hay mucha gente, sobre todo gente mayor, que no lleva las tecnologías como los jóvenes y se les hace bola. Es una pena que se pierda este deporte.

P: Jugaste en el Banco Zaragozano, ¿qué recuerdos guardas de la temporada y la ciudad?

R: Zaragoza fue uno de mis mejores años, tanto deportivos como de estar bien. Solíamos ir al cine todas juntas y luego íbamos a entrenar. Ese año quedamos segundas de liga, respondimos muy bien. Currábamos y luego teníamos nuestro tiempo de ocio. Me acuerdo del Príncipe Felipe, en su momento me pareció el top del top de los pabellones con su calefacción, aire acondicionado y los vestuarios tan grandes. Para mi fue una novedad el poder dejar en tu taquilla tus cosas para poder ducharte. Fue un gran año, con la afición, las jugadoras y el entrenador, solo hay palabras de alago.